lunes, 10 de enero de 2011

Ahora

Ahora que los olivos comienzan a desnudarse de la aceituna; ahora que los dedos, ateridos en las heladas del día recién descorchado, apenas sujetan la vara y se atemperan junto a la hoguera donde asamos tocino. Ahora que brotan las coles, se prepara la tierra para sembrar ajos y empiezan a asomar las yemas en los almendros. Ahora que el garaje de la casa huele al especiado producto de la matanza y que los intensos y copiosos pucheros nos conducen con paso lento junto a la lumbre a descabezar un sueñecito. Ahora que los pastos desbordan de verde y los caminos de ocres como se desborda el ramblón del agua de las lluvias y la sierra nos achica los ojos con su deslumbrante atuendo invernal. Ahora que recurro al calor de la lana para salir a un monte cubierto de pinaza mojada, setas y musgo; ahora que respiro aire puro y bebo agua fresca, que duermo bajo media docena de mantas y me despiertan el gallo y la luz que se cuela a través de las persianas. Ahora que tengo la calma para escuchar mi respiración y el fluir de mi sangre; ahora que puedo caminar sin prisa y detenerme a observar el cambiante paso de las nubes y el ondulante recorrido de las sombras de los árboles en los surcos de los campos dormidos. Ahora que comienzo a andar por este nuevo año sabiendo que aquello es lo más cercano a la felicidad que conozco, un día se quiebra la quimera y un avión me trae de vuelta a la ciudad gris y mugrienta, a la desolación del despertador, al agobio de la multitud, a las prisas y el ruido irritante de las calles, al hastío de una realidad en la que año tras año me siento más ajeno. Y ahora que todo ha vuelto a la grosera normalidad, todo este año entero que acabo de comenzar, con todos sus días y sus semanas y sus meses llenos de horas, minutos y segundos me parece una losa demasiado grande y pesada de cargar.

Sierra Nevada

2 comentarios:

Juan Marin dijo...

Es tan difícil volver que en ocasiones es preferible no ir

arrebatos dijo...

Habrá que cambiar el orden de los factores, y que el volver sea ir y el ir sea regresar.