lunes, 18 de febrero de 2008

Miedo y rechazo

En los países civilizados el estado se reserva para sí, por norma general y bajo el eufemismo de seguridad, el monopolio de la violencia. Las llamadas fuerzas de seguridad o del orden, la policía vaya, es la encargada de ejercer ese monopolio. Esa ejecución debe realizarse bajo el amparo de las leyes, nunca al margen de ellas o de manera arbitraria, porque cuando ocurre eso, lo que debería ser autoridad y respeto se convierte en miedo y rechazo. Como viene sucediendo con demasiada frecuencia.

O como le oí comentar a un amigo catalanista, "quién nos iba a decir que los Mossos harían buena a la Guardia Civil".

4 comentarios:

Nepomuk dijo...

La autoridad y el poder son como la mala cerveza. Basta el pelo de un calvo, para que se nos suba a la cabeza.

Nepoconfuncio.

Anónimo dijo...

Huy, le das un arma a un desgraciado y le conviertes en el ser más peligroso del planeta. Y anda que no hay desgraciaos sueltos!

Petrusdom dijo...

No hay que olvidar que el sadismo es una "forma" de satisfacción sexual como otro cualquiera, algo que no desaparece así como así...
Saludos cordiales

+*¨^¨*+ Un AnGe MoRt •·.·´¯`·.·• dijo...

Hola chiko, muy buen blog...

En cuanto a esta entrada tienes razon la gente ya no puede acudir por ayuda a algun judicial porque resulta que el tipo tambien es de la banda de los agresores y con una bala lo arregla todo... Mierda de gente... jejeje xD

Por aqui andare...