Ósmosis
Si cogemos una ciruela pasa y la sumergimos en un líquido, por ejemplo agua, la ciruela pasa absorberá ese agua hasta terminar hinchada casi como si la acabáramos de coger del árbol. Eso es debido a que la membrana que recubre la ciruela, su piel vaya, es semiporosa. En el interior de la ciruela existe menos presión que en el exterior, donde está el agua. Por tanto, a través de esa membrana, van pasando las moléculas de agua hasta equilibrar la presión, que será antes o después en función de su flexibilidad. Eso es también lo que ocurre, a nivel microscópico, con las células, y es una de las bases de la vida tal como la conocemos. Por el contrario, si sometemos a más presión a la ciruela, por ejemplo inyectándole agua, la expulsará hasta que vuelva a equilibrarse dicha presión. Lo uno se llama ósmosis y lo otro ósmosis inversa.
Me lo explicaron en la escuela, hace un montón de años, y lo hicieron tan bien –era una buena maestra– que lo aprendí por comprensión y no por memorización. Es por eso que hoy sigo recordándolo. Saqué un sobresaliente en biología, ya ves tú.
Pues eso mismo, exactamente lo mismo, es lo que le ocurre a nuestro corazoncito. Que es semiporoso y deja entrar cualquier sentimiento, ya sea bueno o malo, sin distinción. Pero si se lo somete a demasiada presión acaba por saturarse y no sólo no deja entrar nada más, sino que puede llegar a expulsarlo de mala manera. Y que con el tiempo, esa membrana cada vez es menos flexible. Cosas de la edad, ya saben.
Me lo explicaron en la escuela, hace un montón de años, y lo hicieron tan bien –era una buena maestra– que lo aprendí por comprensión y no por memorización. Es por eso que hoy sigo recordándolo. Saqué un sobresaliente en biología, ya ves tú.
Pues eso mismo, exactamente lo mismo, es lo que le ocurre a nuestro corazoncito. Que es semiporoso y deja entrar cualquier sentimiento, ya sea bueno o malo, sin distinción. Pero si se lo somete a demasiada presión acaba por saturarse y no sólo no deja entrar nada más, sino que puede llegar a expulsarlo de mala manera. Y que con el tiempo, esa membrana cada vez es menos flexible. Cosas de la edad, ya saben.
14 comentarios:
Eso pasa.
Pasa que a veces se nos emborracha el corazón-pasa y pasa que la cogorza termina en un resacón que no se pasa y luego nos pasamos algún tiempo sin querer oler el Havana 7.
Pero bueno, para eso están los rabos de pasa, que, como dice mi abuela, sirven para recordar que estas cosas pasan (lo cual no evita que vuelvan a pasar)... y así sucesivamente.
Por cierto, que justo ahora estaba escuchando a la Callas cantando como sólo ella sabía hacer el Casta Diva de Norma.
¿Lo has escuchado interpretado por Cecilia Bartoli?
Sí, y si no fuera porque soy un simple aficionado y cuando se nombra a la Callas sólo vale la genuflexión, diría que tiene la voz más bonita. Pero de la Bartoli no tengo la ópera entera, sólo algunas interpretaciones sueltas. Tendré que solucionarlo.
Escucha esto:
http://www.youtube.com/watch?v=Jr3WNaMJMA8
no se que te encontre, per4o como ando de promotor, te rpomociono un blog que se acaba de hacer una amiga, claro si es que te gusta leer, y no tienes problemas con ser critico XD
ironia-literaria.blogspot.com
Retomando el tema de tu entrada, yo no soporto que me inyecten batería de preguntas.
Sensai, a nadie le gusta me temo, en especial cuando esa batería de preguntas dan varios rodeos y esconden sarta de reproches.
Es que todo tiene su límite, aunque a veces sea del todo desconocido (la de cosas que, sorprendentemente, llegamos a aguantar...). A veces resulta del todo increíble la flexibilidad de algunas membranas.. jaja. Es fácil de entender... pero tiene sus complicaciones en la práctica, su margen de error. Todo tiene su ciencia que decía aquel..
Saludos Arrebatos.
"Es que no puedo más" dije en una ocasión. Y el hermano mayor de un amigo me dijo "no quieras saber hasta dónde eres capaz de aguantar". Tenía razón, sabias palabras. Más adelante he aguantado mucho más que en esa ocasión, pero tampoco es plan. Llega un punto en que la flexibilidad se resiente y uno acaba por no aguantar casi nada.
Así pues, si sumergimos un corazón seco en un líquido de mil amores y lo dejamos un par de días...sacaremos el corazón igual que si lo acabáramos de coger del árbol.
Es lo que tienen en común los corazones con los relojes suizos. Que son antichoque.
Y... Cecilia Bartoli no tiene mucho que envidiar a María Callas.
Ea.
Sí, pero Nepo... un corazón tan pero tan lleno de amor puede ser muy empalagoso. Casi casi como una canción de Maná.
Y sí, los mejores marcapasos son los suizos, que los hacen de cuco.
La Bartoli es tremenda. Pero no he encontrado muchas óperas cantadas por ella... parece más bien que se dedique sobretodo a recitales.
Quizás paguen más...
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