Proud Mary
Era un viejo barco del Mississippi, pero no fue Tom Sawyer quien lo popularizó sino John Fogerty, quien le puso música y con ella pudo navegar más allá de los márgenes de la ribera. Un primo suyo se hizo tristemente famoso una noche, allá en un lejano mayo del 97, cuando se tragó a Jeff Buckley mientras se bañaba cantando Whole Lotta Love. Nunca se lo perdonaremos. Pero sin duda, quien la dotó de fuerza fue la gran-diosa Tina Turner.
Tuve la fortuna de verla en Barcelona hace ya unos cuantos años, en el 90, a sus cincuenta y pico. Desplegó más energía sobre el escenario que la que yo pudiera acumular tras comerme una olla aranesa entera para cuatro personas.
(sugerencia de consumo)
Tina Turner interpretando Proud Mary como un vendaval
Y su particular versión de Whole Lotta Love, todavía con Ike Turner
¿Que por qué? Pues porque sí, porque tengo todos sus discos en vinilo, y hasta que no arregle el tocadiscos tendré una especie de mono por escuchar su manera de cargarme de energía.
Tuve la fortuna de verla en Barcelona hace ya unos cuantos años, en el 90, a sus cincuenta y pico. Desplegó más energía sobre el escenario que la que yo pudiera acumular tras comerme una olla aranesa entera para cuatro personas.
(sugerencia de consumo)
Tina Turner interpretando Proud Mary como un vendaval
Y su particular versión de Whole Lotta Love, todavía con Ike Turner
¿Que por qué? Pues porque sí, porque tengo todos sus discos en vinilo, y hasta que no arregle el tocadiscos tendré una especie de mono por escuchar su manera de cargarme de energía.
Entradas
4 comentarios:
Después de según qué comidas, señor Arrebatos, uno no está para la épica, si acaso... para la percusión en soliloquio.
De los nombres que renombra, me quedo con el de Jeff Buckley. Alguna vez le he dicho que los Fogerty nunca fueron santos de mi especial devoción y en cuanto a Tina, desde que abandonó (con sobrados motivos) a Ike, incrementó su energía.... pero perdió la rabia.
Debo decir que ese día hacía un frío atroz. También valga en mi descargo que a mí, a la olla aranesa, todavía no me la habían presentado. Pero tras comerme dos raciones dos, con el estómago presionando la garganta, lamenté haber pedido solomillo de segundo. Eso sí, por poco tiempo, porque cuando vi esas piezas de carne afilé los dientes y no quedaron ni las miajas.
Al salir del restaurante, tras terminar el vino y las copas de rigor, la nieve se fundía a mi paso.
En cuanto a Tina le doy la razón. Siempre necesitó de un "mentor", por decirlo de algún modo. Y sin duda, para su estilo, por mucho que le pese, era mejor Ike Turner que Mark Knopfler o Phil Collins.
En cuanto a Fogerty... Eran simples y pueblerinos, pero pese a eso (o quizás precisamente por eso) me gustan horrores.
Buckley es otra historia. Con un solo disco de estudio (y una muerte prematura) ya forjó su mito. Lástima que nos dejara tan poco para quererlo.
Publicar un comentario