De reyes
Siempre he creído en la igualdad de derechos y deberes entre personas. Por eso mismo me defino como republicano, por no concebir dentro de una sociedad democrática los privilegios monárquicos. Conste que no digo que sea antimonárquico, nada de eso. En ningún caso iría en su contra como hicieron los franceses a finales del S. XVIII. Simplemente los mandaría a la cola del paro. Supongo que definirse como republicano en este país debe ser parecido a defender la monarquía en Italia o el comunismo en EEUU. Bueno, quizás esto último sea más parecido a ser un demócrata en Cuba o un palestino en Israel. Y por supuesto, nada parecido a ser pobre en Rusia, niña en China o mujer en Yemen. Así que, pese a todo, me considero afortunado.
La figura del rey en este país ha sido siempre algo indiscutible y su abolición incuestionable. Como si de la infalibilidad del Papa se tratara. Son esas cosas que aprendes de pequeño esponjando el ambiente. Lo mismo que aprendes (sabes, de hecho) que si eres bueno irás al cielo y si eres malo al infierno. Es así y punto, no hay posibilidad de réplica. Así que siempre tuve claro que iría al infierno. Y tan contento. ¿Para qué ir a otra parte si allí será donde encuentre a todos mis amigos? Pero de un tiempo a esta parte ya dudo. Sé que iré al infierno, de eso no hay duda, lo que no tengo claro es que me apetezca, pues allí irán también todos los obispos de la Conferencia Episcopal, que se suponía que debían ser buenos.
A lo que iba, que me estoy dispersando.
Este año, pese a ser un republicano convencido, los Reyes Magos (que saben de mis ideas) han sido buenos conmigo. Han venido de oriente y me han traído una cámara de fotos digital. Así que, de ahora en adelante, todas las fotos que veáis ya no estarán hechas con una cámara prestada o escaneadas de prestado también.
A ver si un día de estos, aunque sea para devolverles el favor, un rey de occidente lleva a oriente paz y felicidad, en lugar de la acostumbrada hambre, miseria, guerra y muerte.
La figura del rey en este país ha sido siempre algo indiscutible y su abolición incuestionable. Como si de la infalibilidad del Papa se tratara. Son esas cosas que aprendes de pequeño esponjando el ambiente. Lo mismo que aprendes (sabes, de hecho) que si eres bueno irás al cielo y si eres malo al infierno. Es así y punto, no hay posibilidad de réplica. Así que siempre tuve claro que iría al infierno. Y tan contento. ¿Para qué ir a otra parte si allí será donde encuentre a todos mis amigos? Pero de un tiempo a esta parte ya dudo. Sé que iré al infierno, de eso no hay duda, lo que no tengo claro es que me apetezca, pues allí irán también todos los obispos de la Conferencia Episcopal, que se suponía que debían ser buenos.
A lo que iba, que me estoy dispersando.
Este año, pese a ser un republicano convencido, los Reyes Magos (que saben de mis ideas) han sido buenos conmigo. Han venido de oriente y me han traído una cámara de fotos digital. Así que, de ahora en adelante, todas las fotos que veáis ya no estarán hechas con una cámara prestada o escaneadas de prestado también.
A ver si un día de estos, aunque sea para devolverles el favor, un rey de occidente lleva a oriente paz y felicidad, en lugar de la acostumbrada hambre, miseria, guerra y muerte.
3 comentarios:
Mi querido Arrebatos, me conmueves.
¿O es que estoy susceptible como una nena?.
No, de lo que se trata es de lo que escribes: inicias el año, insuflado de ánimos . Se percibe en ti una fresca vitalidad que celebro.
Y para ti, todo lo mejor, con ventura...
***
Yo también iré al infierono, sin duda.
:-)
Dificilmente un rey de occidente va a llevar a oriente estos regalos tan hermosos y que merece todo país del mundo, y será dificil mientras los paises de oriente sean ricos en petroleo y la ambición de los "reyes" de occidente sea del tamaño que es.
Creo que yo me porté mal, me dejaron un carbon.
Muchos saludos, felicidades por tu regalo de reyes.
sabes? a mi también me trajeron una cámara digital.......
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